Este mensaje de amor, no solo va para mi madre que gracias a Dios se encuentra conmigo, sino también para aquellas desemparadas o que ya no están con nosotros en esta dimensión, como el caso de las abuelitas que han sido un ejemplo de fortaleza y amor en los hogares. 

Hoy por hoy, comparto la dicha y la felicidad de todos aquellos que tienen a su mamá, pero recordemos que no es un día de celebrar sino siempre...

Ellas son los seres que más nos aman.

Muchas felicidades

10 de mayo de 2017

Karlos Sierra