Hace años hice mi contrato de vida: Yo soy un hombre amoroso, leal y responsable.
Y me doy cuenta que llevarlo a cabo tiene sus decibeles y tambaleos, pero dentro de mí está la fuente y el conocimiento.
Encontrar discernimiento suele ser difícil cuando no trabajamos en nosotros y solo vivimos en lo exterior.
¿Qué soy, quién soy, qué quiero, y hacía dónde voy?
Contestarlo de forma muy sincera nos puede servir muchísimo, y es que lograrlo seguro será complicado, pero la imposibilidad está en detenerte y la acción está en el mecanismo de lograrlo.
Aún con la pereza, aún con los problemas, aún con los contratiempos, hay que volver a empezar.
En este bello caminar y viaje de la vida existe tu luz que viene de la luminosidad creadora y un sin fin de ángeles y seres espirituales que acompañan tu andar, pero también seres físicos que tendrás que seleccionar de forma muy adecuada.
Sí, nos equivocamos en elegir; ¿Cuántos de nosotros no hemos tenido amigos o parejas que han obstruido nuestro resplandor?, cuando nos llega la claridad, tomar conciencia de la situación será una buena arma, a veces es hasta necesario y sano alejarnos de lo que nos ayuda a crecer, o integrar ciertos límites para no desaparecer por completo.
La plenitud está en amar a nuestro ser, en aprovechar esos chispazos divinos que nos conducen a nuestras misiones y es que a veces nos cuesta trabajo tomar las riendas de lo que desde pequeño vamos descubriendo, pero no lo abandones, ya que es parte preponderante de tu huella y sello que dejarás en la tierra.
Si no puedes hacerlo o eliges no al 100%, busca la oportunidad de sacarlo porque éste abraza tu luz, esa que quiere ser salida de cada célula de tu cuerpo, tu pasión y amor...
Aplaudo a todo aquel que recuerde quién es y que esté efectuando su misión, algunos nos cuesta más trabajo descifrarlo, pero al final, todos tenemos un fin y tarde o temprano por alguna extraña razón se hace presente, se manifiesta como magia.
La intuición es grande, hazle caso. No la abandones y tampoco lo hagas con tus misiones.
¡Bendiciones!
Fotografías: by Karlos Sierra. Locaciones: Arroyo de Piedra, Trapiche del Rosario, Mpio. de Actopan, Ver. | La imagen de Jesucristo fue tomada en una gasolinera en la autopista de Veracruz a Córdoba, a la altura de Cuitlahuac, Ver.